Disponibilidad:
- Casa del lectorDisponible 1 ejemplar
- Libro Técnico SurDisponible apróx. en 9 días
- AlmacénDisponible apróx. en 2-3 días
- Editorial:
- ANAYA
- Año de edición:
- 2016
- Materia
- Lit. infantil 0-11 años
- ISBN:
- 978-84-698-0888-7
- Páginas:
- 120
- Encuadernación:
- Cartoné
- Colección:
- VARIOS
ALMA Y LA ISLA
RORÍGUEZ, MÓNICA
El XIII Premio Anaya de Literatura Infantil nos pone en contacto con uno de los dramas más escandalosos de estos tiempos: la llegada de refugiados a las costas de los países desarrollados y el... Leer más
El XIII Premio Anaya de Literatura Infantil nos pone en contacto con uno de los dramas más escandalosos de estos tiempos: la llegada de refugiados a las costas de los países desarrollados y el modo en el que estos países realizan la acogida de los nuevos náufragos del siglo XXI. La historia se aborda desde un caso concreto protagonizado por una niña, rescatada del mar, y por el hijo del pescador que salva a la niña de morir ahogada. El encuentro entre ambos está presidido por los recelos y el miedo a lo desconocido que viene con una niña diferente y también con el misterio de lo que trae alguien que no se comunica y de la que se ignora lo que siente. La escritura de Mónica Rodríguez contenida y lírica, es capaz de reflejar la ambivalencia de los sentimientos de los protagonistas, la confusión y las emociones de los que acogen y deben ponerse en el lugar de los que llegan para intentar , al menos, intuir algo del infortunio que siente huyendo de países en guerra o de la miseria. El contraste con estos sentimientos oscuros llega de la naturaleza que tiene en su obra una presencia luminosa y reconciliadora. La narración no se resume en un tema pues contiene elementos mágicos y otros personajes, que sin ser los protagonistas, constituyen una parte importante de la historia pues complementan el universo de sentimientos y emociones que giran en torno a este conflicto humanitario que nos afecta a todos. (Reseña de Kirico)
Alma ha llegado del mar. Otto no entiende su idioma y, desde que está en su casa y le ha tenido que dejar su habitación, se siente desplazado. La atención de sus padres, su abuela y hermanos ahora se dirige a Alma. Y a Otto, el pequeño de la familia, esto no le hace mucha gracia.
A pesar de todo, la comunicación entre ambos irá más allá de las palabras y la amistad trascenderá la posible distancia que aparece en un primer momento.
Gracias a la presencia de un amuleto, Otto entenderá mejor el origen de Almaz Sebhat, el verdadero nombre de la niña que vino del mar.