Puerto Esperanza es mar, siempre el mar. El protagonista busca desesperada mente a sus padres. Busca sus orígenes más allá de toda espera. La búsqueda inquebrantable hace de la novela misma una persecución con el destino, con el otro y consigo mismo. No será hasta el fnal de la historia en que todo se desencadena como una crónica, como un bello relato de esos de familia, en que finalmente se conoce la verdad de lo que somos y de donde venimos. Puerto Esperanza es el puerto, el hombre, la re?exión que debemos hacer con nosotros mismos.